Pere Aragay

Seducido por la geometría. Así trabaja, desde hace varios años, trasladando a la escultura  su percepción de las formas geométricas. En cambio, en el ámbito de la pintura, inicialmente orienta el lienzo a la figuración, sobre todo a través del paisaje. Un paisaje que paulatinamente se ha ido esquematizando, sintetizando, y que finalmente le ha conducido a dedicar sus más recientes pinturas también a la geometría. Una geometría que puede hallar con cualquier pretexto, en cada rincón de la vida, en todos los ámbitos de su entorno. Pere Aragay nos demuestra con sus Esculturas Singulares que la creatividad no tiene límites ni con referencia a materiales ni, a la composición escultórica, puramente geométrica, terriblemente contemporánea y que puede convivir en cualquier ámbito, sea a un nivel de coleccionismo, o como elemento decorativo de una casa. Respecto a Sin Título, el espectador contempla una escultura abstracta, que permite al espectador crear mil y un mensajes entre el equilibrio, la serenidad, la extrañeza, la curiosidad, pero siempre dentro del contexto de unas piezas creadas y realizadas con meticulosidad y precisión. Pere Aragay demuestra como la técnica y escultor forman un binomio, que supone una ocasión óptima para descubrir su trabajo creativo, de lenta, pero constante maduración experimental. Lo que puede aparentemente parecer una contradicción es en realidad una visión moderna, dentro de una disciplina de planteamiento y habilidad, que compensa la exigencia del propio escultor.

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